Las apuestas deportivas son una modalidad de juego consistente en la obtención de premios mediante la predicción de los resultados de eventos deportivos. El juego problemático y el juego patológico son cosas distintas. Un adicto a las apuestas deportivas es una persona que padece juego patológico, y que ahora se denomina trastorno del juego o ludopatía, en inglés Gambling Disorder (DSM-5). Estas personas no consiguen dejar las apuestas deportivas por ellos mismos.
El juego patológico se caracteriza por un patrón de comportamiento de juego episódico o persistente. A su vez, este puede ser online (a través de Internet) o presencial (como las quinielas o las carreras de caballos). Estos son los síntoms característicos de un adicto a las apuestas deportivas:
El patrón de conducta de un adicto a las apuestas deportivas puede ser continuo o episódico y recurrente. Esto da como resultado una angustia significativa y el deterioro de áreas vitales como son el ámbito familiar, social, educativo o laboral. Para asignar el diagnóstico de adicción al juego, estas características deben ser evidentes durante un período de al menos 12 meses. Sin embargo, la duración para establecer el diagnóstico por trastorno del juego puede acortarse si se cumplen todos los criterios de la adicción a las apuestas deportivas o si los síntomas son graves.
Una mujer ludópata presenta algunas diferencias respecto a los hombres con adicción al juego. Por ejemplo, determinados estudios destacan distintas formas de juego preferidas entre las mujeres. También existen diferencias de género respecto al inicio de la ludopatía, su progesión y los trastornos concurrentes. En […]
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