Mucha gente nos pregunta cuales son los síntomas al día siguiente de consumir coca. La cocaína es una droga particularmente “tramposa”. Muchas personas se inician en el consumo de esta droga de forma experimental y casi siempre esporádicamente. La curiosidad, la coyuntura o cierto “glamour” que envuelve al consumo de cocaína, pueden hacerte perder el miedo a probar esta droga. Sin embargo, casi nadie suele estar suficientemente preparado para prever el alto riesgo que implica consumir cocaína.
La coca es una droga muy potente con carácter neurotóxico. Es decir, la cocaína cambia el normal funcionamiento del sistema nervioso central y por lo tanto del comportamiento. Además, causa adicción con facilidad.
Al principio, los síntomas al día siguiente de consumir coca son prácticamente imperceptibles. El efecto a corto plazo de la cocaína es potente pero poco duradero: euforia, seguridad en ti mismo, sensación de bienestar, locuacidad, etc. Al día siguiente prácticamente no existen evidencias del consumo puntual de cocaína. No obstante, que existan síntomas del consumo reciente de cocaína dependerá principalmente de la cantidad de droga consumida, la vía de administración y la frecuencia del consumo.
Dosis, vía de administración y frecuencia del consumo de cocaína
Con la cocaína pasa algo parecido que con otras drogas o el alcohol. Si el consumo es puntual, y en pequeñas cantidades (consumo esporádico) los efectos son fugaces y prácticamente indetectables al día siguiente. Sin embargo, si el consumo es repetido (consumo crónico) o en grandes cantidades, los síntomas son marcados y de carácter más grave.
Resulta conveniente señalar que aunque no existan síntomas excesivamente evidentes por el consumo puntual de cocaína, existen test de detección de cocaína que pueden ayudarnos a identificar el consumo reciente de esta droga.
La dosis de cocaína y los síntomas
Como comentábamos, la dosis de cocaína determina el tiempo de detección y ciertos síntomas al día siguiente de consumir coca. Debemos resaltar que cualquier tipo de contacto con esta droga implica “intoxicación por cocaína” (incluso el consumo puntual).
Si el consumo de coca se produce en grandes cantidades (aunque sea esporádicamente) puede llegar a provocar una sobredosis por cocaína. La toxicidad aguda asociada con la sobredosis de cocaína puede desencadenar eventos potencialmente mortales que incluyen convulsiones, insuficiencia cardiovascular o depresión respiratoria. Esto es más probable en casos de consumo crónico o cuando existe adicción a la cocaína.
Por lo tanto, la dosis, y por extensión el tiempo que tarda en eliminarse la cocaína del cuerpo, puede determinar algunos síntomas al día siguiente de consumir coca. Así como los efectos euforizantes de pequeñas dosis de cocaína son de corta duración (de 20 a 45 minutos aproximadamente), el principal síntoma al día siguiente de consumir coca suele ser decaimiento, falta de energía y apatía durante varias horas.
La vía de administración y los síntomas
Al igual que la dosis, la vía de administración también condiciona los síntomas al día siguiente de consumir coca. La forma más habitual de consumir cocaína es la vía nasal o aspirada.
A corto plazo, esnifar coca por la nariz puede provocar congestión nasal, rinorrea y hemorragias nasales (epistaxis). A largo plazo, el consumo repetido de cocaína por esta vía puede provocar graves complicaciones como la perforación del tabique nasal.
Otras vías de administración, como la cocaína fumada o inyectada, suelen provocar síntomas físicos y psicológicos más marcados y suelen aparecer cuando existe una dependencia severa.
La frecuencia del consumo y los síntomas
En último término, la frecuencia del consumo es un factor decisivo respecto a la sintomatología por consumo de cocaína. Evidentemente, una alta frecuencia del consumo hace más visibles los efectos a corto plazo. Entre las diferentes señales que apuntan al consumo de cocaína, posiblemente el cambio en el estado de ánimo es la señal más característica.
Por otro lado, la sobreexcitación que causa la cocaína suele provocar insomnio en numerosas ocasiones. Es frecuente entre los consumidores habituales de cocaína el uso de benzodiacepinas (pastillas para dormir) para compensar esta sobreexcitación y regular el ciclo del sueño.
A continuación veremos los síntomas más frecuentes por el consumo esporádico y crónico de cocaína. En cualquier caso (tanto si el consumo es puntual como frecuente), los cambios del comportamiento, cambios en los horarios o actividades habituales, pérdida de apetito, insominio y movimientos anómalos de dinero, son claros síntomas al día siguiente de consumir coca.
Síntomas por consumir cocaína esporádicamente
Los síntomas por consumir cocaína esporádicamente van desde la afectación física a la psicológica. Independientemente de la dosis, el efecto predominante de la cocaína es la euforia. La coca es un estimulante tan potente que provoca sentimientos de grandiosidad, confianza, mayor energía y un estado de bienestar aumentado.
La cocaína provoca la liberación masiva de dopamina en ciertas áreas del cerebro e impide su recaptación. Esto se traduce en un potente efecto gratificante de carácter súbito. Posteriormente, la cocaína desencadena un estado anormalmente depresivo que suele cursar con cansancio, cambios en el estado de ánimo, ciclo del sueño afectado o anhedonia generalizada. Esto forma parte del denominado síndrome de abstinencia a la cocaína.
Física y psicológicamente los síntomas al día siguiente por consumir coca de forma puntual son difíciles de detectar: sueño anómalo, estado anímico alterado, decaimiento y malestar general. Sin embargo, ninguno de estos síntomas se produce de forma relevante cuando el consumo es puntual.
Por último, debemos resaltar la elevada prevalencia del consumo simultáneo de alcohol y cocaína. El consumidor de cocaína descubre rapidamente que amortiguar el exceso de euforia con alcohol le permite seguir bebiendo alejado del estado de embriaguez y consumir mayor cantidad de cocaína. Sin embargo, la combinación de alcohol con cocaína resulta sumamente tóxica y característica de personas con dependencia. Por esta razón, el consumo atípico de alcohol puede ser indicativo o síntoma del consumo de cocaína.
Síntomas por consumir cocaína de forma repetida
Como comentábamos, los síntomas por consumo crónico de coca son más vistosos y de carácter más grave que los del consumo puntual. El principal síntoma del consumo crónico de esta droga es la adicción a la cocaína. Consumir coca habitualmente provoca que el organismo genere tolerancia a esta droga. Esto implica la necesidad de aumentar la dosis para conseguir los efectos gratificantes. Es decir, necesitaremos cada vez mayor cantidad y con mayor frecuencia para alcanzar los efectos. Incluso el consumo puntual o esporádico de cocaína es capaz de generar tolerancia.
Los síntomas físicos más visibles por el consumo crónico de cocaína son: pérdida de peso, ojeras, aspecto pálido en la piel (debido a la vasoconstricción) y un descuido progresivo del cuidado personal.
Sin embargo los síntomas más característicos de un adicto a la coca son comportamentales: discusiones frecuentes, importantes cambios del estado de ánimo (irritabilidad, disforia, apatía o estado pseudo depresivo) y por supuesto, dificultad para dejar la cocaína. Tanto el uso, el abuso, como la adicción a la cocaína, provocan en mayor o menor medida cuadros de dependencia psicológica considerables.
Conclusiones sobre los síntomas por consumo de cocaína a largo plazo
La persona que consume cocaína con regularidad tiende progresivamente a encerrarse en sí mismo. El adicto a la cocaína se vuelve suspicaz o incluso paranoico. De hecho, entre el 30 y el 80 por cien de los consumidores habituales de cocaína desarrollan en algún momento un cuadro psicótico denominado psicosis cocaínica.
Además, las celotipias (celos patológicos), el delirio o la agresividad también están relacionados con el consumo crónico de cocaína. Por otro lado, también es bastante característica la desadaptación sexual entre los consumidores frecuentes de cocaína. Este podría ser uno de los síntomas más habituales por consumir coca a largo plazo. En este sentido, las relaciones de pareja de los consumidores habituales de cocaína suelen quedar seriamente afectadas.
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Preguntas frecuentes sobre el consumo de cocaína
¿Cuáles son los efectos de la coca en la nariz?
✔️ La cocaína es un potente anestésico con propiedades vasoconstrictoras. El consumo puntual de cocaína produce irritación de la mucosa nasal y una mayor secreción de mucosidad. El uso repetido de coca provoca congestión nasal y puede producir ulceración de la mucosa, por lo que puede provocar sangrado nasal. En los casos más graves el tejido nasal puede terminar necrosando, e incluso perforar el tabique nasal y el paladar. Mira aquí los efectos de la coca en la nariz.
¿Existen tics propios de cocainómanos?
✔️ Sí. Los tics son espasmos, movimientos o sonidos repentinos que las personas hacen de forma repetida y que no pueden controlar voluntariamente. En el caso de la cocaína hace referencia al gesto de llevarse la mano a la nariz ya que el consumo nasal causa picor, rinorrea y abundante secreción de mucosidad. Otro tic característico de los cocainómanos es la llamativa, constante y repetida inspiración nasal.
¿Cuáles son los efectos sexuales de la cocaína?
✔️ A priori la cocaína disminuye la capacidad de experimentar placer con el sexo. Generalmente la cocaina causa cierta distorsión del comportamiento sexual normalizado. Por ejemplo, el consumo frecuente de cocaína puede provocar disfunción eréctil en los hombres. Mira esto para saber más: Cocaína y Sexo: aspectos fundamentales a tener en cuenta.
¿Es malo meterse coca de vez en cuando?
✔️ Sí. Cualquier contacto con la cocaína es nocivo para la salud ya que se trata de una droga especialmente peligrosa, sobre todo a nivel cardíaco. Además, también causa ansiedad con rapidez. Meterse coca de vez en cuando puede crear adicción y provocar psicosis cocaínica, entre otros síntomas. Por lo tanto, el consumo de cocaína es altamente contraproducente en cualquier frecuencia. Mira esto para saber más: 8 consejos para dejar la cocaína.